"—Yo soy como esos relojes viejos que tienen la máquina trastornada, no hay manera de componerla ni de arreglarla. Arrimados a la pared, con su forma de ataúd, desafían a los mejores relojeros. En la caja de esos relojes hay polvo y telas de araña, y entre dos pesas de plomo desiguales, que cuelgan de cuerdas negras, una péndola dorada, que es como el corazón que hace tic, tac, sin cansarse. Aunque anden, estos relojes adelantan o atrasan, y cuando llega el momento de dar la horas, se disparan con ruido terrible en sonoras campanadas, y en vez del cuarto dan la media, y cuando tienen que dar las doce dan la una.
Estas campanadas insólitas parecen asombrar al mismo reloj de donde salen, y a todo lo que le rodea, y los muebles y los cuadros se piensa que se han de mirar unos a otros con extrañeza y con sorna, y hacerse un guiño burlón y confidencial."
Definiciones. — Croquis sentimentales
cITA: ‘Los amores tardíos’ \ Pío Baroja \\ fOTOGRAFÍA: D






Esa cabalgata!! Qué auténtica! Un año de estos volveré para verla de nuevo y llevarme una super bolsa de caramelos. Me encantan tus fotos. :)
ResponderEliminarMe alegro que te gusten las fotos Bruma ^__________^
ResponderEliminarHe de añadir que la competencia por los caramelos era feroz: madres, padres, abuelas y niños luchando palmo a palmo por hacerse con el control de las mejores zonas, gente que invertían paraguas y los descolgaban desde sus ventanas al paso de las carrozas, en fin, ¡todo un espectáculo!