Actos oníricos subversivos (5/ )

e trata de un limonero pequeño, como si fuera un bonsái. Está cargado de limones de un tamaño considerable y de un amarillo brillante. Está situado en un terreno en obras, hay enormes grúas y aparejos de perforación detrás de una valla, en un terreno fértil de suponer pues la vegetación crece por todos lados. Hay también grandes y exuberantes flores de color lila al lado del pequeño limonero. Tengo la sensación de haber estado anteriormente en este lugar, aunque no consigo situar cuando ni donde. El suelo a ratos está empantanado, como si a lo largo del día hubiese llovido y en el suelo aún quedasen charcos, creo que estoy semidescalzo, no me importa pisar el barro, cuando lo hago me doy cuenta de que llevo unas sandalias que se hunden en el lodo mojándome los pies, es una sensación agradable. Las distancias están exageradas, me cuesta caminar por el terreno, desplazarme de un sitio a otro; la realidad ha sido deformada de tal forma que parece un ambiente surrealista pero no opresivo.
Luego ya no estoy en el campo vallado, ha desaparecido el limonero, ahora estoy en mi azotea, han pasado muchos años desde la actualidad, las puertas rojas de los trasteros están deterioradas, a punto de descolgarse de sus goznes, el suelo cóncavo como si fuera a hundirse, sin embargo no es esa la sensación que tengo al pisar por ahí, el suelo es sólido a pesar de su forma, también este sitio está sobredimensionado y deformado, parecen tener una distancia descomunal los muros que separan los diferentes bloques de piso por los cuales solíamos saltar. Algunos trasteros están vacíos y con las puertas abiertas como si los dueños los hubiesen abandonado, como si allí no habitase ya nadie, casi no se oye ruido alguno. Es el tiempo lo que impresiona aquí, también la maleza, las plantas que crecen vigorosamente aunque no deberían estar. Luego oímos la voz de mi madre, nos escondemos mis hermanos, unos amigos del barrio y yo al final de la azotea; allí donde creemos que no puede llegar, entre la maleza que ha crecido. Creo que ha subido a tender y nos llama, no se para que.

áRBOL\\ "En general, es símbolo de protección material. Verse arrimado a un árbol robusto es indicio de que nada ha de faltar desde el punto de vista material, de que en la vida del individuo habrá siempre un protector que le hará de madre. Los frutos y las hojas del árbol indicarán exuberancia de esa protección. Si se halla en una tierra fértil, ello será indicio de que el soñador se encuentra en un buen terreno, del que podrá sacar muchos bienes, de modo que el sueño es una invitación al trabajo. Si, por el contrario el terreno es estéril y el árbol raquítico indicará exactamente lo contrario."

tEXTO: D \ cITA: 'El significado de los sueños'