Parvadas de aves, vuelos de fractales

Como si fueran parte de un sólo organismo, el vuelo en conjunto de las aves forma asombrosos patrones de autosemejanza y metarreferencia, no es casualidad que las civilizaciones antiguas vieran en su vuelo un lenguaje sagrado de adivinación celeste.
"El remoto rey de los pájaros, el Simurg, deja caer en el centro de China una pluma espléndida; los pájaros deciden buscarlo, hartos de su presente anarquía. Saben que el nombre de su rey quiere decir “Treinta Pájaros”, saben que su alcázar está en el Kaf, la montaña o cordillera circular que rodea la tierra. Al principio, algunos pájaros se acobardan: el ruiseñor alega su amor por la rosa; el loro la belleza que es la razón de que viva enjaulado; la perdiz no puede prescindir de las sierras; ni la garza de los pantanos; ni la lechuza de las ruinas. Acometen al fin la desesperada aventura; superan siete valles o mares, el nombre del penúltimo es Vértigo, el último se llama Aniquilación. Muchos peregrinos desertan; otros mueren en la travesía. Treinta, purificados por sus trabajos, pisan la montaña del Simurg. Lo contemplan al fin: perciben que ellos son el Simurg y que el Simurg es cada uno de ellos y todos ellos."

FUENTE: pijamasurf.com \\\ CITA: 'El Libro de los Seres Imaginarios' \ Jorge Luis Borges

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