Amor cibernético

asta que te vayas estaré mirándote, cuando ya te hayas ido dejare de mirarte y empezare a echarte en falta.
Yo que soy de lo que no hay o de lo que poco queda, yo que mantengo esta pose de-conmigo-no-va. Yo uno entre diez mil millones tan escondido dentro de mí que casi me cuesta hallarme, y entonces apareces tú, con esa luz que irradias, con ese ímpetu que te hace ir hacia delante y cumplir con tu objetivo. A ti que te detienes a esperarme yo te acaricio con el puntero del ratón, en ese avatar tuyo, porque ya te has ido. Y ni siquiera tuve tiempo de saber quien demonios eras en realidad. Tú tan llena de vida que casi me entran ganas de robarla, bueno, no es eso exactamente. Lo que digo es que me da rabia no haberte conocido dos o tres años antes, no ahora que tu destino te espera en otro lugar, muy alejada de mí. Pero eso ya poco importa. Lo único que hago ahora es esperar que te asomes a tu ventana para imaginar que de algún modo ese avatar tuyo cobra vida y empieza a hablarle a mi corazón. Pero eso no sucederá porque lo que no puede ser no puede ser y además es imposible. Entonces todo lo que me queda es la renuncia. Aceptar que estas cosas son así, que hay gente que por alguna razón del destino son puestas en tu camino en un breve intervalo de tiempo, para que casi no tengas tiempo de percibir su importancia.
Son puestas, quizás, para encender esa chispa que lleva tanto tiempo apagada en ti o para dejar una muesca imborrable en tu memoria y que te recuerda que aún queda esperanza, que no todo está perdido, que de tanto en tanto el viento sopla favorable para impulsar mi barquito a la deriva un poco hacia su meta. Y que si, que si hay motivos suficientes para bregar con toda esta vida tontaina de la que soy marioneta. También yo impregno a mi manera. Creo el surco, que luego cuando sane será una cicatriz en tu piel, para el día de mañana, cuando te falte el aliento y eches la mirada hacia atrás para hacer el recuento; acuda mi recuerdo a tu memoria, que a modo de suave brisa de mar, ha de empujar tu barquito a buen puerto.

TEXTO: D

No hay comentarios:

Publicar un comentario